La película Joker se coronó como la película
clasificada para adultos más taquillera de la historia, al superar los 788
millones de dólares recaudados en todo el mundo, con los que batió el récord
anteriormente registrado por Deadpool.
La película se calificó de categoría R en Estados Unidos, lo
que significa que no es recomendable para menores de 17 años, algo que en otras
partes del mundo se ha traducido en restricciones similares según las
clasificaciones por edades de cada país.
A pesar de esa limitación de público, las primeras estimaciones
han previsto que la cinta cruzará la frontera de los 800 millones de dólares a
lo largo de este fin de semana.
Anteriormente, Deadpool consiguió el logro de ser la
película para adultos más taquillera con 783 millones recaudados en 2016.
De hecho, el protagonista de Deadpool, Ryan Reynolds, felicitó
por Twitter a la cinta que ha superado su récord con una foto del cartel de
Joker en la que aparece Joaquín Phoenix como el villano de la franquicia de
cómics de DC.
La noticia del logro de Joker llega después de una gran
controversia por su proyección en salas de cine debido a su violencia
explícita, por la que fue acusada por ciertas agrupaciones de ser un peligro
por promover la violencia.
Ciertas personas recordaron el tiroteo masivo de 2012 en la
localidad de Aurora (Colorado), en el que murieron 12 personas durante una
proyección de la película de Batman The Dark Knight Rises, y expresaron su
preocupación por el próximo lanzamiento de Joker.
El atacante, que entonces tenía 24 años, fue detenido a las
afueras del lugar por la policía, ante la que se identificó como el Joker, uno
de los enemigos de Batman en la historia de ficción y protagonista de la nueva
cinta.
“No se equivoquen: Ni el personaje ficticio Joker ni la
película respaldan la violencia del mundo real de ningún tipo. No es la
intención de la película, los cineastas o el estudio hacer de este personaje un
héroe“, dijo la compañía en un comunicado enviado a medios de comunicación de
la industria del entretenimiento.
Por su parte, el propio Phoenix aseguró en una entrevista
que “acusar a una película de glorificar la violencia es absurdo“.