El ahorro conjunto del gobierno, empresas y hogares mexicanos registró una contracción de 13.8 por ciento en 2020 respecto al año previo, lo que significó su mayor caída desde 1993, año en que el Inegi comenzó registros.
El ahorro bruto nacional, que representa la parte del ingreso disponible que no se gasta en bienes y servicios de consumo final, fue de 4.4 billones de pesos al cerrar el año, casi 712 mil millones de pesos menos que un año antes.
El ahorro de los mexicanos se vio afectado por la crisis derivada de la pandemia e hiló dos años a la baja.
Asimismo, la participación del ahorro bruto en el Producto Interno Bruto (PIB) fue de 19.2 por ciento, la más baja desde que el Inegi lleva registro.
El indicador se constituye por dos componentes: la economía interna y los recursos procedentes del resto del mundo para financiar al país, es decir transferencias e inversión extranjera.
El primero contabilizó cinco billones de pesos al cierre de año, con una contracción de 0.7 por ciento a tasa anual.
En tanto, los ahorros de instituciones no residentes, es decir los extranjeros, que realizan transacciones o inversiones en el país fueron negativos en 579 mil 579 millones de pesos,
Es la primera vez que el ahorro externo, que llega al país para convertirse en inversión extranjera, cierra el año en número rojos.
El Inegi también dio a conocer el indicador de oferta y demanda global de vienes y servicios, el cual cayó 10 por ciento al cierre de 2020 en su comparación anual.
El indicador que muestra las variables de producción, consumo, inversión y comercio exterior, tuvo su pero resultado anual desde 1994, año en que el Inegi lleva registro, y sumó también dos años consecutivos a la baja.
La caída se debió principalmente a contracciones en la formación bruta de capital fijo y en el consumo privado, de 18.2 y 10.4 por ciento, respectivamente, mientras que el consumo de gobierno aumento 2.3 por ciento respecto a 2019.