Pese a que Estados Unidos contemple reducir la tasa del impuesto a la renta corporativa (ISR) del actual 35 al 20 por ciento, México no debe hacer lo mismo como respuesta, pues sería irresponsable y eliminaría el superávit fiscal primario esperado para el próximo año, señalaron economistas de BBVA Research.
En un reporte comentaron que en el caso de que el Gobierno mexicano decidiera reducir la tasa del ISR a personas morales de 30 a 20 por ciento, el ISR mostraría una contracción anual de 16.9 por ciento, equivalente a 1.2 por ciento del PIB.
“Esto eliminaría el superávit fiscal primario (de 0.9 por ciento del PIB) planeado para 2018. Una medida como esa sería irresponsable en el contexto actual en que el Gobierno lleva a cabo un proceso de consolidación fiscal y, sobre todo, considerando los bajos niveles históricos de recaudación observados en México”, destacó la institución.
Para los analistas de BBVA Research esto no significa que no sea deseable lograr una reforma fiscal que baje la carga a las empresas y la suba al consumo, pero esta es una discusión que se debe tener de forma independiente al proceso fiscal en Estados Unidos y siempre cuidando que cualquier cambio sea al menos neutral en lo que a recaudación se refiere.