Facebook parece determinado a tomar cartas en el llamado “porno de la venganza”. Y no, no será prohibiendo el envío de material “sexual” a través de su plataforma.
La red social comenzó a probar en Australia un sistema que permite a los usuarios enviarse fotos de desnudos… de forma segura.
La estrategia consiste en “marcar” la fotografía de forma única, como si fuera una huella digital.
Esto, según la plataforma, servirá para identificar y bloquear cualquier intento de volver a subir esa misma imagen.
“Sería como enviar tu imagen por correo electrónico, pero obviamente esta es una manera mucho más segura. No están almacenando la imagen, están almacenando el enlace y usando inteligencia artificial y otras tecnologías de foto-coincidencia”, explicó a la televisora ABC la comisionada de ciberseguridad australiana Julie Inman Grant, quien trabaja junto a Facebook en esta iniciativa.
“Vemos muchos escenarios en los que tal vez se tomaron fotos o videos de manera consensuada en un punto, pero no hubo ningún tipo de consentimiento para enviar las imágenes o videos de manera más amplia”, añade.
Aunque muchos expertos celebraron la iniciativa, otros aseguran que el problema continuará en otras redes sociales como WhatsApp e Instagram.
La profesora Clare McGlynn, experta de la Facultad de Derecho de Durham, considera que la iniciativa de Facebook resulta “un experimento innovador”, pero limitado.
“Este enfoque solo va a funcionar para algunas personas y cuando pensamos en la gran cantidad de desnudos y otras imágenes compartidas cada día, claramente esto no es una solución“, explica a la BBC.
Otros, como Graham Cluley, un consultor de seguridad, opinan que el propio experimento no está fuera de riegos.
“Facebook sabe que habrá mucha gente preocupada por cómo maneja un contenido tan sensible, y me imagino que han pensado mucho en minimizar las posibilidades de que algo salga mal”, comenta.
Por qué Australia
Pero ¿por qué la red social escogió Australia para realizar este experimento piloto?
Según Inman Grant, el porno de la venganza es un problema creciente en Australia.
De hecho, estudios realizados por organizaciones locales sugieren que una de cada cinco mujeres de entre 18 y 45 años puede haber sido víctima de este fenómeno.
En marzo pasado, Facebook se vio envuelto en un escándalo cuando se conoció que un grupo secreto de unos 30.000 marines, Marine United, compartía rutinariamente imágenes de colegas mujeres desnudas o semidesnudas.
En respuesta a las revelaciones, la red social introdujo una función que permite etiquetar las imágenes como porno de la venganza a partir de la tecnología de foto-coincidencia.